Texto Bíblico:
Lucas 13:1-5 “En este mismo tiempo estaban allí algunos que le contaban acerca de los galileos cuya sangre Pilato había mezclado con los sacrificios de ellos. 2Respondiendo Jesús, les dijo: ¿Pensáis que estos galileos, porque padecieron tales cosas, eran más pecadores que todos los galileos? 3Os digo: No; antes si no os arrepentís, todos pereceréis igualmente. 4O aquellos dieciocho sobre los cuales cayó la torre en Siloé, y los mató, ¿pensáis que eran más culpables que todos los hombres que habitan en Jerusalén? 5Os digo: No; antes si no os arrepentís, todos pereceréis igualmente.”
Introducción:
El Señor Jesucristo pone en perspectiva dos acontecimientos que padecieron unos hombres y le pregunta a la audiencia que, si ellos creían que eso que les había ocurrido a esos hombres, había sido porque eran más pecadores que los demás y el puntualiza diciendo, que delante de Dios, todos son pecadores y que sí no se arrepienten, todos perecerán igual que aquellos.
Arrepentimiento en griego es: “Metanoia”, que significa: Meta=cambio noia=mente
Tipos De Arrepentimiento
I) Arrepentimiento como Caín
Es un arrepentimiento carnal provocado por el castigo que se va a recibir.
Génesis 4:8-14 “Y dijo Caín a su hermano Abel: Salgamos al campo. Y aconteció que estando ellos en el campo, Caín se levantó contra su hermano Abel, y lo mató. 9Y Jehová dijo a Caín: ¿Dónde está Abel tu hermano? Y él respondió: No sé. ¿Soy yo acaso guarda de mi hermano? 10Y él le dijo: ¿Qué has hecho? La voz de la sangre de tu hermano clama a mí desde la tierra. 11Ahora, pues, maldito seas tú de la tierra, que abrió su boca para recibir de tu mano la sangre de tu hermano. 12Cuando labres la tierra, no te volverá a dar su fuerza; errante y extranjero serás en la tierra. 13Y dijo Caín a Jehová: Grande es mi castigo para ser soportado. 14He aquí me echas hoy de la tierra, y de tu presencia me esconderé, y seré errante y extranjero en la tierra; y sucederá que cualquiera que me hallare, me matará.”
II) Arrepentimiento como Faraón.
Es un arrepentimiento transitorio, que dura mientras dura el castigo.
Éxodo 12:29-33 “Y aconteció que a la medianoche Jehová hirió a todo primogénito en la tierra de Egipto, desde el primogénito de Faraón que se sentaba sobre su trono hasta el primogénito del cautivo que estaba en la cárcel, y todo primogénito de los animales. 30Y se levantó aquella noche Faraón, él y todos sus siervos, y todos los egipcios; y hubo un gran clamor en Egipto, porque no había casa donde no hubiese un muerto. 31E hizo llamar a Moisés y a Aarón de noche, y les dijo: Salid de en medio de mi pueblo vosotros y los hijos de Israel, e id, servid a Jehová, como habéis dicho. 32Tomad también vuestras ovejas y vuestras vacas, como habéis dicho, e idos; y bendecidme también a mí. 33Y los egipcios apremiaban al pueblo, dándose prisa a echarlos de la tierra; porque decían: Todos somos muertos.”
III) Arrepentimiento como Herodes.
Es un arrepentimiento superficial, que sólo produce tristeza, pero no produce cambios.
Mateo 14:1-10 “En aquel tiempo Herodes el tetrarca oyó la fama de Jesús, 2y dijo a sus criados: Este es Juan el Bautista; ha resucitado de los muertos, y por eso actúan en él estos poderes. 3Porque Herodes había prendido a Juan, y le había encadenado y metido en la cárcel, por causa de Herodías, mujer de Felipe su hermano; 4porque Juan le decía: No te es lícito tenerla. 5Y Herodes quería matarle, pero temía al pueblo; porque tenían a Juan por profeta. 6Pero cuando se celebraba el cumpleaños de Herodes, la hija de Herodías danzó en medio, y agradó a Herodes, 7por lo cual éste le prometió con juramento darle todo lo que pidiese. 8Ella, instruida primero por su madre, dijo: Dame aquí en un plato la cabeza de Juan el Bautista. 9Entonces el rey se entristeció; pero a causa del juramento, y de los que estaban con él a la mesa, mandó que se la diesen, 10y ordenó decapitar a Juan en la cárcel.”
IV) Arrepentimiento de Judas.
Arrepentimiento en desesperación que termina en la muerte.
Mateo 27:3-5 “Entonces Judas, el que le había entregado, viendo que era condenado, devolvió arrepentido las treinta piezas de plata a los principales sacerdotes y a los ancianos, 4diciendo: Yo he pecado entregando sangre inocente. Mas ellos dijeron: ¿Qué nos importa a nosotros? !Allá tú! 5Y arrojando las piezas de plata en el templo, salió, y fue y se ahorcó.”
Este arrepentimiento te lleva a buscar el perdón con la persona incorrecta. (sacerdote, santos) y por lo tanto hacer explicaciones que no sirven para nada.(mandas, rezos mecanizados, etc.) y como resultado te conducirá a la muerte.
Cristo es el único que puede perdonar tus pecados y el sacrificio que hizo por ti, te lleva a la vida eterna.
Veamos El Arrepentimiento Genuino Que Dios Desea Que Tengamos.
1.- Un arrepentimiento que produzca un cambio de mente y de dirección.
Hechos 17:30 “Pero Dios, habiendo pasado por alto los tiempos de esta ignorancia, ahora manda a todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan;”
Dios manda Y Él quiere que todos procedan al arrepentimiento.
2 Pedro 3:9 “El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento.”
Convertíos y viviréis.
Ezequiel 18:31-32 “Echad de vosotros todas vuestras transgresiones con que habéis pecado, y haceos un corazón nuevo y un espíritu nuevo. ¿Por qué moriréis, casa de Israel? 32Porque no quiero la muerte del que muere, dice Jehová el Señor; convertíos, pues, y viviréis.”
La conversión es un proceso de cambio en la vida del hombre, dejando atrás la vida pecaminosa, y dirigir su vida hacia la obediencia de Dios. Vuélvase a Jehová, el cual tendrá de él misericordia, y al Dios nuestro, el cual será amplio en perdonar.
Isaías 55:7 “Deje el impío su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase a Jehová, el cual tendrá de él misericordia, y al Dios nuestro, el cual será amplio en perdonar.”
2.- El arrepentimiento genuino del hombre traerá como consecuencia, la misericordia de Dios.
El verdadero arrepentimiento conduce al perdón.
2 Corintios 7:9-10 “Ahora me gozo, no porque hayáis sido contristados, sino porque fuisteis contristados para arrepentimiento; porque habéis sido contristados según Dios, para que ninguna pérdida padecieseis por nuestra parte. 10Porque la tristeza que es según Dios produce arrepentimiento para salvación, de que no hay que arrepentirse; pero la tristeza del mundo produce muerte.”
La tristeza que produce Dios produce arrepentimiento para salvación pero la tristeza del mundo produce un arrepentimiento superficial y carnal, y produce muerte.
El Espíritu Santo nos convence de pecado, de justicia y de juicio y a través de Él se genera un arrepentimiento genuino.
Apocalipsis 16:8-11 “El cuarto ángel derramó su copa sobre el sol, al cual fue dado quemar a los hombres con fuego. 9Y los hombres se quemaron con el gran calor, y blasfemaron el nombre de Dios, que tiene poder sobre estas plagas, y no se arrepintieron para darle gloria. 10El quinto ángel derramó su copa sobre el trono de la bestia; y su reino se cubrió de tinieblas, y mordían de dolor sus lenguas, 11y blasfemaron contra el Dios del cielo por sus dolores y por sus úlceras, y no se arrepintieron de sus obras.”
Cuando el hombre se arrepiente genuinamente de sus malas obras, le están dando la gloria a Dios, sin embargo, cuando él arrepentimiento es superficial o carnal, trae consigo blasfemia a Dios.
Conclusión:
Es importante entender que el pesar que nos produce el pecado nos debe de llevar a un arrepentimiento genuino, y lo más importante, es que el tipo de arrepentimiento que estemos manifestando frente a Dios, se verá reflejado en EVITAR seguir pecando.
¿Es tu arrepentimiento genuino?
Ponte a cuenta con Dios.