Texto Bíblico:
Lucas 22:54-62 “Y prendiéndole, le llevaron, y le condujeron a casa del sumo sacerdote. Y Pedro le seguía de lejos. 55Y habiendo ellos encendido fuego en medio del patio, se sentaron alrededor; y Pedro se sentó también entre ellos. 56Pero una criada, al verle sentado al fuego, se fijó en él, y dijo: También éste estaba con él. 57Pero él lo negó, diciendo: Mujer, no lo conozco. 58Un poco después, viéndole otro, dijo: Tú también eres de ellos. Y Pedro dijo: Hombre, no lo soy. 59Como una hora después, otro afirmaba, diciendo: Verdaderamente también éste estaba con él, porque es galileo. 60Y Pedro dijo: Hombre, no sé lo que dices. Y en seguida, mientras él todavía hablaba, el gallo cantó. 61Entonces, vuelto el Señor, miró a Pedro; y Pedro se acordó de la palabra del Señor, que le había dicho: Antes que el gallo cante, me negarás tres veces. 62Y Pedro, saliendo fuera, lloró amargamente.”
Introducción:
La Biblia narra en repetidas ocasiones muchos eventos en los cuales Pedro estuvo presente. Pedro formaba del grupo íntimo de Cristo, junto con Jacobo y Juan, los hijos de Zebedeo.
a) Pedro reconoce que Jesús era el Hijo del Dios viviente.
Mateo 16:15-17 “El les dijo: Y vosotros, ¿Quién decís que soy yo? 16Respondiendo Simón Pedro, dijo: Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente.”
b) Pedro pudo estar presente cuando Jesucristo se transfiguró.
Mateo 17:1-4 “Seis días después, Jesús tomó a Pedro, a Jacobo y a Juan su hermano, y los llevó aparte a un monte alto; 2y se transfiguró delante de ellos, y resplandeció su rostro como el sol, y sus vestidos se hicieron blancos como la luz. 3Y he aquí les aparecieron Moisés y Elías, hablando con él.“
c) Pedro pudo caminar sobre el mar e ir hacia Jesús.
Mateo 14:28-29 “Entonces le respondió Pedro, y dijo: Señor, si eres tú, manda que yo vaya a ti sobre las aguas. 29Y él dijo: Ven. Y descendiendo Pedro de la barca, andaba sobre las aguas para ir a Jesús.”
d) Pedro le corta la oreja a un hombre, cuando Jesús iba a ser apresado.
Marcos 14:47 “Pero uno de los que estaban allí, sacando la espada, hirió al siervo del sumo sacerdote, cortándole la oreja.”
¿Si Pedro era un discípulo tan cercano al Señor Jesucristo, que fue lo que hizo que él lo negara?
Pedro afirma que nunca negaría a Jesucristo.
Lucas 22:31-32 “Dijo también el Señor: Simón, Simón, he aquí Satanás os ha pedido para zarandearos como a trigo; 32pero yo he rogado por ti, que tu fe no falte; y tú, una vez vuelto, confirma a tus hermanos.”
Error:
1.- Pedro tenía confianza en si mismo y eso lo llevó a fallar.
Debes de permanecer en Jesucristo y eso hará que vivas fortalecido para evitar llenarte de orgullo o de autosuficiencia.
Juan 15:5 “Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer.”
No debes tener temor frente a las pruebas. Y la falta de fe, sin embargo, Dios le da la oportunidad a Pedro para que proclame su nombre.
Lucas 22:62 “Y Pedro, saliendo fuera, lloró amargamente.”
Pedro reconoce su falta frente al Señor Jesucristo y vemos a Pedro arrepentido
2.- ¿Qué te ha provocado el dejar de seguir al Señor Jesucristo?
¿Tus deleites? ¿Las pruebas? ¿El trabajo?
El no predicar el Evangelio hace que niegues a Jesucristo.
Otro ejemplo es el rey David.
2 Samuel 11:1-5 “Aconteció al año siguiente, en el tiempo que salen los reyes a la guerra, que David envió a Joab, y con él a sus siervos y a todo Israel, y destruyeron a los amonitas, y sitiaron a Rabá; pero David se quedó en Jerusalén. 2Y sucedió un día, al caer la tarde, que se levantó David de su lecho y se paseaba sobre el terrado de la casa real; y vio desde el terrado a una mujer que se estaba bañando, la cual era muy hermosa. 3Envió David a preguntar por aquella mujer, y le dijeron: Aquella es Betsabé hija de Eliam, mujer de Urías heteo. 4Y envió David mensajeros, y la tomó; y vino a él, y él durmió con ella. Luego ella se purificó de su inmundicia, y se volvió a su casa. 5Y concibió la mujer, y envió a hacerlo saber a David, diciendo: Estoy encinta.”
David falla a Dios, adúltera con Betsabé y manda matar al esposo de ella, pero se arrepiente y Dios lo usa grandemente.
Salmos 51:18 “Haz bien con tu benevolencia a Sion; Edifica los muros de Jerusalén.”
Después de que Dios ve el arrepentimiento de Pedro lo usa con gran poder.
Necesitas arrepentirte y vivir una vida cerca de Dios, reconocer tus errores y acepta la disciplina y es hasta entonces cuando podrás recibir de parte de Dios, el perdón y Dios te dará de su gracia para seguir usándote.
Acércate nuevamente a Dios.