Texto Bíblico:
Mateo 6:19-21 “No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín corrompen, y donde ladrones minan y hurtan; 20sino haceos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el orín corrompen, y donde ladrones no minan ni hurtan. 21Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón.”
Introducción:
La empresa del diablo trabaja noche y día y su propósito es tentar al cristiano y hacerlo caer para no obedecer la voluntad de Dios. El diablo tiene aliados como lo es la mafia, drogas, inmoralidad, etc. Pero muchas veces el anzuelo que usa contra el hombre es la necesidad y la pobreza.
Por esa causa muchos cristianos viven para trabajar, queriendo no sólo salir de la pobreza, sino desean tener muchos bienes materiales.
Por esta razón, el cristiano debe preguntarse en dónde tiene su corazón.
Génesis 6:5 “Y vio Jehová que la maldad de los hombres era mucha en la tierra, y que todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo solamente el mal.”
El corazón del hombre por naturaleza es perverso, cuida tu corazón ya que ahí se anida tu proceder y tus pensamientos.
Jonás 1:1-2 “Vino palabra de Jehová a Jonás hijo de Amitai, diciendo: 2Levántate y ve a Nínive, aquella gran ciudad, y pregona contra ella; porque ha subido su maldad delante de mí.”
El cristiano tiene culpa por no enseñar la verdad y sólo tradiciones que desvían la fe.
1 Pedro 2:1 “Desechando, pues, toda malicia, todo engaño, hipocresía, envidias, y todas las detracciones,”
Vivimos tiempos difíciles y debido a las circunstancias actuales, el cristiano anda buscando tesoros en el lugar equivocado.
¿Qué le prometiste a Dios y no lo has hecho?
¿Qué dijo que cambiaría de su vida, y su proceder no ha sido el adecuado?
El cristiano debe desechar toda malicia, para poder crecer espiritualmente, pero al mismo tiempo desear el alimento espiritual para crecer, y lograr ser un cristiano fuerte y alcanzar la madurez.
El cristiano debe de predicar el Evangelio, y compartir ese tesoro con los inconversos.
1 Corintios 15:1-4 “Además os declaro, hermanos, el evangelio que os he predicado, el cual también recibisteis, en el cual también perseveráis; 2por el cual asimismo, si retenéis la palabra que os he predicado, sois salvos, si no creísteis en vano. 3Porque primeramente os he enseñado lo que asimismo recibí: Que Cristo murió por nuestros pecados, conforme a las Escrituras; 4y que fue sepultado, y que resucitó al tercer día, conforme a las Escrituras;”
Nuestro tesoro debe ser la Palabra de Dios, ahí debe de estar nuestro corazón; Si este año no sirvió a Dios, HOY está a tiempo de tomar decisiones, porque todo incumplimiento hará que el cristiano se enfríe espiritualmente.
Busque este año reconciliarse con Dios, reconociendo que ha estado ocupado en otras cosas, menos en la obra o en el servicio de Dios.
¿Qué es lo más importante para usted? ¿Su tesoro está en lo material o en lo espiritual?
Vienen tiempos difíciles, pero tendrás que tomar decisiones, por ello debe de acercarse a Dios en oración, para que su actuar mejore, o para que empiece a predicar el Evangelio.
Mateo 7:24-27 “Cualquiera, pues, que me oye estas palabras, y las hace, le compararé a un hombre prudente, que edificó su casa sobre la roca. 25Descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y golpearon contra aquella casa; y no cayó, porque estaba fundada sobre la roca. 26Pero cualquiera que me oye estas palabras y no las hace, le compararé a un hombre insensato, que edificó su casa sobre la arena; 27y descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y dieron con ímpetu contra aquella casa; y cayó, y fue grande su ruina.”
Debe de decidir oír la Palabra de Dios y HACERLA, es decir ponerla en práctica, para lograr ser hombres prudentes y no insensatos.
Su corazón debe estar edificado sobre la roca, es decir, sobre el Señor Jesucristo, debe acercarse a Dios, para mostrarle al mundo que usted es imitador del Señor Jesucristo.
1 Pedro 2:4-5 “Acercándoos a él, piedra viva, desechada ciertamente por los hombres, mas para Dios escogida y preciosa, 5vosotros también, como piedras vivas, sed edificados como casa espiritual y sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales aceptables a Dios por medio de Jesucristo.”
1 Pedro 1:16 “Porque escrito está: Sed santos, porque yo soy santo.”
No haga tesoros en la tierra.
Ponte a cuentas con Dios.