Texto Bíblico:
1 Corintios 3:11-15 “Porque nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto, el cual es Jesucristo. 12Y si sobre este fundamento alguno edificare oro, plata, piedras preciosas, madera, heno, hojarasca, 13la obra de cada uno se hará manifiesta; porque el día la declarará, pues por el fuego será revelada; y la obra de cada uno cuál sea, el fuego la probará. 14Si permaneciere la obra de alguno que sobreedificó, recibirá recompensa. 15Si la obra de alguno se quemare, él sufrirá pérdida, si bien él mismo será salvo, aunque así como por fuego.”
Introducción:
A lo largo de la historia, la Biblia siempre ha registrado algunos juicios a los que se enfrentó la humanidad, por motivo de su pecado.
Uno de esos juicios es muy conocido, se refiere a la historia del arca de Noe, la maldad era mucha y Dios traería a juicio a la humanidad por sus abominables pecados.
Otro juicio al que se vieron sometidas, fueron Sodoma y Gomorra. Y se pueden enumerar muchos ejemplos más, pero ahora nos detendremos a analizar los juicios a los que se enfrentará todo hombre sea cristiano o no lo sea.
Juicio pasado; Juicio Presente y Juicio Futuro
1.-Juicio Pasado.
Este juicio es para todos los hombres, y en ese juicio serán enjuiciados por su pecado.
Isaías 53:6 “Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros.”
2 Corintios 1:21 ” El que nos confirma con vosotros en Cristo, y el que nos ungió, es Dios.”
1 Pedro 2:24 “Quien llevó él mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros, estando muertos a los pecados, vivamos a la justicia; y por cuya herida fuisteis sanados.”
Solo el Señor Jesucristo puede perdonar todos los pecados y solo Él puede librar el alma del hombre pecador del infierno.
Mateo 10:28 “Y no temáis a los que matan el cuerpo, más el alma no pueden matar; temed más bien a aquel que puede destruir el alma y el cuerpo en el infierno.”
2.-Juicio Presente.
Todo cristiano debe de hacerse un examen así mismo, para saber cómo anda su vida delante de Dios.
1 Corintios 11:28-29 “Por tanto, pruébese cada uno a sí mismo, y coma así del pan, y beba de la copa. 29Porque el que come y bebe indignamente, sin discernir el cuerpo del Señor, juicio come y bebe para sí.”
Y cuando se reconoce, siempre será mejor confesarlo al Señor Jesús.
1 Juan 1:9 “Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.”
Hebreos 12:5 “y habéis ya olvidado la exhortación que como a hijos se os dirige, diciendo: Hijo mío, no menosprecies la disciplina del Señor, Ni desmayes cuando eres reprendido por él;”
Salmos 51:12 “Vuélveme el gozo de tu salvación, Y espíritu noble me sustente.”
Todo pecado NO CONFESADO hará que el cristiano pierda el gozo de su salvación y tendrán que vivir una vida en amargura, una vida de frustración y de derrota.
3.- Juicio futuro.
1 Corintios 3:11-15 “Porque nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto, el cual es Jesucristo. 12Y si sobre este fundamento alguno edificare oro, plata, piedras preciosas, madera, heno, hojarasca, 13la obra de cada uno se hará manifiesta; porque el día la declarará, pues por el fuego será revelada; y la obra de cada uno cuál sea, el fuego la probará. 14Si permaneciere la obra de alguno que sobreedificó, recibirá recompensa. 15Si la obra de alguno se quemare, él sufrirá pérdida, si bien él mismo será salvo, aunque así como por fuego.”
Por la bendita gracia de Dios los hombres que son salvos han sido librados del infierno, sin embargo, las obras que hayan hecho en vida para Dios, estas serán juzgadas.
Ese será el juicio del creyente como siervos, que todo cristiano pondrá a los pies del Señor Jesucristo:
A) La corona incorruptible.
1 Corintios 9:25 “Todo aquel que lucha, de todo se abstiene; ellos, a la verdad, para recibir una corona corruptible, pero nosotros, una incorruptible.”
El cristiano siempre se deberá abstenerse de pecar, siempre y cuando quiera agradar a Dios.
B) La corona de las almas ganadas.
1 Tesalonicenses 2:19-20 “Porque ¿Cuál es nuestra esperanza, o gozo, o corona de que me gloríe? ¿No lo sois vosotros, delante de nuestro Señor Jesucristo, en su venida? 20Vosotros sois nuestra gloria y gozo.”
Salmos 126:6 “Irá andando y llorando el que lleva la preciosa semilla; Mas volverá a venir con regocijo, trayendo sus gavillas.”
C) La corona de justicia.
2 Timoteo 4:8 “Por lo demás, me está guardada la corona de justicia, la cual me dará el Señor, juez justo, en aquel día; y no sólo a mí, sino también a todos los que aman su venida.”
D) La corona de gloria.
1 Pedro 5:4 “Y cuando aparezca el Príncipe de los pastores, vosotros recibiréis la corona incorruptible de gloria.”
E) La corona de vida
Santiago 1:12 “Bienaventurado el varón que soporta la tentación; porque cuando haya resistido la prueba, recibirá la corona de vida, que Dios ha prometido a los que le aman.”
Si hoy viniera, el Señor Jesucristo, ¿tienes que ofrecerle?
Ponte a cuentas con Dios.