Las Siete Copas Del Apocalipsis – Pastor Arturo Muñoz Guzmán

Texto Bíblico:

Apocalipsis 16:1 “Oí una gran voz que decía desde el templo a los siete ángeles: Id y derramad sobre la tierra las siete copas de la ira de Dios.”

Introducción:

1 – Estas son las copas del juicio final, que eran advertencias. Dios primero le advierte al hombre a través de las trompetas, pero si éstas son ignoradas en forma persistente entonces Él envía sus copas de ira.

Las siete copas son llamadas también las siete plagas.

La ira de Dios es derramada sobre la tierra, lo que es una idea bastante común en las Escrituras (Salmos 69:24, 79:6, Ezequiel 20:8., Jeremías 10:25, Sofonías 3:8). Siguen el mismo patrón que las siete trompetas: cuatro (afectando a la creación: tierra, mar, agua, cosmos), luego dos (afectando a la bestia) y la final, cuando las ciudades de las naciones se desploman. Las primeras cuatro afectan la tierra, el mar, las fuentes de las aguas y el sol, es decir la creación de Dios, según el anuncio de los tres ángeles (14:7).

La voz del templo sería la voz de Dios (Isaías 66:6). Las copas son derramadas sobre la creación de Dios y afectan al hombre indirectamente, por medio de su medio ambiente. Luego siguen dos juicios adicionales que se refieren a la bestia, seguida por el juicio final. El hombre es juzgado personalmente más tarde.

2 Tesalonicenses 1:7-9 Cuando Cristo venga de nuevo “dará retribución a los que no conocieron a Dios, ni obedecen al evangelio de nuestro Señor Jesucristo”.

La Copa 1 es derramada sobre la tierra y afecta a la gente que tenía la marca de la bestia y adoraban su imagen

La Copa 2 es derramada sobre el mar

La Copa 3 es derramada sobre los ríos

La Copa 4 es derramada sobre el sol

La Copa 5 es derramada sobre el trono de la bestia

La Copa 6 es derramada sobre el Éufrates

La Copa 7 es derramada en el aire

Deberíamos notar que las primeras cuatro copas afectan el orden creado, como fue anunciado por el primer ángel que ordena a los que viven en la tierra, “… adorad a aquel que hizo el cielo y la tierra, el mar y las fuentes de las aguas” (14:7). Como se rehusan a adorarlo y adoran a la bestia, las primeras copas afectan el orden creado: la tierra, el mar, las aguas y el sol.

I.-La primera copa. (Ap. 16:2)

(Ap. 16:2) Fue el primero, y derramó su copa sobre la tierra, y vino una úlcera maligna y pestilente sobre los hombres que tenían la marca de la bestia, y que adoraban su imagen.

2.- La copa es derramada sobre la tierra, pero afecta al hombre directamente. La primera copa afecta a todas las personas que adoran a la bestia y que le han dado, por lo tanto, su lealtad a él antes que a Dios.

Se rehúsan a adorar a Dios y por lo tanto su hora de Juicio ha llegado (14:7). Vea la similitud con la sexta plaga de Egipto (Ex. 9:9) en donde aparecen sarpullido con úlceras en los hombres y en las bestias. Aquellos que reciben la marca de la bestia son marcados por Dios (Mounce). Note que la copa es vertida sobre la tierra, pero la gente es afectada, a diferencia de la primera trompeta que no afecta a la gente (8:7).

Así como Satanás afligió a Job con una sarna maligna (Job 2:7), los seguidores de la bestia son afligidos con úlceras malignas y pestilentes. En Deuteronomio 28:35 pústulas malignas serían el juicio sobre los que desobedecieran a Dios.

II. La segunda copa (16:3)

(Apocalipsis 16:3) El segundo ángel derramó su copa sobre el mar, y éste se convirtió en sangre como de muerto; y murió todo ser vivo que había en el mar.

3 – La sangre se usa para indicar muerte. Todo se murió en el mar, comparado con las trompetas donde sólo una tercera parte murió (8:9). Note que en las plagas egipcias era sangre literal. Los dos testigos tienen también el poder de convertir las aguas en sangre (11:6). Vea la similitud con la primera plaga de Egipto (Éxodo 7:17) donde el Nilo se convierte en sangre. Esto nos recuerda también de lago de sangre del lagar de la ira de Dios en 14:19. Cada cosa viva en el mar murió, comparado con la segunda trompeta en que una tercera parte de las criaturas vivas en el mar murió, y un tercio de los barcos fueron destruidos (8:8-9)

III.- La tercera copa (16:4)

(Ap. 16:4) El tercer ángel derramó su copa sobre los ríos, y sobre las fuentes de las aguas, y se convirtieron en sangre. {5} Y oí al ángel de las aguas, que decía: Justo eres tú, oh Señor, el que eres y que eras, el Santo, porque has juzgado las cosas. {6} Por cuanto derramaron la sangre de los santos y de los profetas, también tú les has dado a beber sangre; pues lo merecen. {7} También oí a otro, que desde el altar decía: Ciertamente, Señor Dios Todopoderoso, tus juicios son verdaderos y justos.

4 – El tercer ángel derramó su copa sobre los ríos, y sobre las fuentes de las aguas, y se convirtieron en sangre – Así como el segundo ángel hizo que el mar se convirtiera en sangre, ahora el tercer ángel convierte a los ríos y los manantiales en sangre (Sal. 78:44). La sangre está indicando muerte más que en forma literal; la sangre es el castigo por derramar la sangre de los santos y los profetas (v. 6). Compare esta plaga con la primera plaga de Egipto (Ex. 7:17-19) en donde los peces en el río mueren y el agua se vuelve imbebible aún en los baldes de madera y las jarras de piedra. Compare esto también con la tercera trompeta en donde una tercera parte de las aguas se vuelven amargas y mucha gente murió (8:11). Uno debería suponer que la sangre indica que muchas personas murieron.

5 – Y oí al ángel de las aguas, que decía: Justo eres tú, oh Señor, el que eres y que eras, el Santo, porque has juzgado las cosas – Note que Dios es descrito como el que es y el que era; no es descrito como el que va a venir porque ya ha llegado el juicio final del mundo. Compare con la séptima trompeta (11:17) en donde ya venido. Aquí está el ángel encargado de las aguas; en 14:8 encontramos el ángel encargado del fuego. Algunos podrán decir que Dios fue duro en sus juicios, pero en relación con los pecados que el hombre ha cometido, no lo es.

6 – Por cuanto derramaron la sangre de los santos y de los profetas, también tú les has dado a beber sangre; pues lo merecen – La razón para el juicio se da aquí: han derramado la sangre de los santos, uno de los crímenes más atroces que el hombre puede cometer (1 Tim. 1:13). El castigo se adecua al crimen; ellos derraman sangre así que deben beber sangre. Esto es similar al código levítico de “vida por vida” (Lev. 24:17-18, ver también Génsesis 9:5-6). Así como Juan usa la expresión “ebrio con la sangre de los santos” en 17:6, indicando que la prostituta había matado a los santos, así acá beber sangre significa que esta gente murió como un justo castigo por asesinar a los santos (Sal. 79, Is. 49:26). En la plaga de los egipcios toda el agua bebible fue convertida en sangre aun en los baldes de madera y las jarras de piedra (Ex. 7:19). Juan toma esto y lo usa para mostrar que los perseguidores del pueblo de Dios deben ahora beber sangre porque ellos han derramado la sangre de los santos. Los profetas son incluidos por la tradición de persecución de los profetas (Mt. 5:12, 23:37, Lc. 11:49). Los dos testigos eran profetas y fueron matados (11:7, 10) y en 18:24 dice que en Babilonia “se halló la sangre de los profetas y de los santos, y de todos los que han sido muertos en la tierra”. Nota: “pues lo merecen” es literalmente “pues son dignos”. Contraste con el Cordero que es digno por Su sangre derramada.

7 – También oí a otro, que desde el altar decía: Ciertamente, Señor Dios Todopoderoso, tus juicios son verdaderos y justos – Bajo el altar están los mártires, cuya sangre ha sido derramada (6:9). El clamor de los mártires para que su sangre derramada sea vengada es cumplido finalmente cuando Dios juzga a los habitantes de la tierra. También se cumple más tarde por la caída de Babilonia (ver 19:2).

4. La cuarta copa (16:8)

(Ap. 16:8) El cuarto ángel derramó su copa sobre el sol, al cual fue dado quemar a los hombres con fuego. {9} Y los hombres se quemaron con el gran calor, y blasfemaron el nombre de Dios, que tiene poder sobre estas plagas, y no se arrepintieron para darle gloria.

8 – El cuarto ángel derramó su copa sobre el sol, al cual fue dado quemar a los hombres con fuego – Note que la esfera de influencia de los ángeles se extiende hasta el sol y no sólo hasta la tierra. No hay ninguna plaga correspondiente en Egipto, aunque la cuarta trompeta afecta al sol (el sol es oscurecido, 8:12), pero esta plaga parece escatológica. Esta es la contrapartida celestial de la bestia de la tierra que hizo que cayera fuego del cielo a plena vista de los hombres y engañando a la humanidad (13:13-14). Compare con Deuteronomiio 28:22, “Jehová te herirá de tisis, de fiebre, de inflamación y de ardor, con sequía, con calamidad repentina y con añublo; y te perseguirán hasta que perezcas.”

9 – Y los hombres se quemaron con el gran calor, y blasfemaron el nombre de Dios, que tiene poder sobre estas plagas, y no se arrepintieron para darle gloria – Fueron quemados por el gran calor del sol. Esto es en contraste con los santos que no serán quemados por el sol (7:16). Compare con Sadrac, Mesac y Abednego que no fueron quemados por el horno de fuego. Note la declaración explícita de que estas plagas están bajo el control de Dios. La acusación contra el hombre es que rehusó arrepentirse y glorificarlo a Él. El ángel ya le había dado a la humanidad una última oportunidad en 14:7 para arrepentirse antes de estas plagas. Note cómo blasfemaron el nombre de Dios; habían tomado el carácter de la bestia que está cubierta de nombres blasfemos (13:1, 13:5-6, 17:3). A pesar de esto. la humanidad todavía se rehúsa a arrepentirse y glorificar a Dios. Al menos reconocieron que Dios era la causa última de estas plagas y no la causa inmediata de su propio pecado (Sweet).

5. La quinta copa (16:10)

(Ap. 16:10) El quinto ángel derramó su copa sobre el trono de la bestia; y su reino se cubrió de tinieblas, y mordían de dolor sus lenguas, {11} y blasfemaron contra el Dios del cielo por sus dolores y por sus úlceras, y no se arrepintieron de sus obras.

10 – El quinto ángel derramó su copa sobre el trono de la bestia; y su reino se cubrió de tinieblas – El hombre prefiere las tinieblas a la luz así que esto es lo que consigue. El hombre experimenta ahora la realidad del reino de Satanás, la ausencia de todo bien. Habiendo rechazado la bondad de Dios consiguen el mal que prefieren. El reino de Satanás es el reino de las tinieblas. Compare con la novena plaga de Egipto (Éxodo 10:22) cuando la oscuridad cubrió la tierra durante tres días. Caird destaca que la oscuridad representa la desintegración política del reino de la bestia. Sweet señala que el trono de Satanás, que compartía con la bestia (13:2) estaba en Pérgamo (2:13), la capital provincial romana. Sugiere la destrucción de la administración central del imperio – algo así como el caos de la guerra civil de 68-69 d.C. (Sweet).

10 – y mordían de dolor sus lenguas, {11} y blasfemaron contra el Dios del cielo por sus dolores y por sus úlceras, y no se arrepintieron de sus obras – Los efectos de la primera plaga estaban todavía en efecto. Por segunda vez, como en la cuarta copa, lo maldicen a Dios. Esto está nuevamente en contraste con los santos para quienes ya no habrá dolor (21:4). Compare esto con la agonía causada por las heridas de las langostas en la quinta trompeta (9:5). Si comparamos el quinto sello, la quinta trompeta y la quinta copa, encontramos aflicción. En el quinto sello la aflicción es para la iglesia; en la quinta trompeta, las langostas atormentan a los que no tienen el sello de Dios en sus frentes, y en la quinta copa vemos la agonía de las personas que tenían la marca de la bestia y adoraban a su imagen.

11 -, y no se arrepintieron de sus obras – La acusación contra el hombre es que, a pesar de estas copas, todavía rehusaron arrepentirse (ver también la cuarta copa, v. 9). Como Faraón, fueron endurecidos más allá del arrepentimiento. El comentario de Pablo en Romanos 9:17-18 es instructivo: Faraón fue levantado para que Dios pudiera demostrar Su poder y para que Su nombre fuera proclamado en toda la tierra.

6. La sexta copa (16:12)

El sexto ángel derramó su copa sobre el gran río Éufrates; y el agua de éste se secó, para que estuviese preparado el camino a los reyes del oriente. {13} Y vi salir de la boca del dragón, y de la boca de la bestia, y de la boca del falso profeta, tres espíritus inmundos a manera de ranas; {14} pues son espíritus de demonios, que hacen señales, y van a los reyes de la tierra en todo el mundo, para reunirlos a la batalla de aquel gran día del Dios Todopoderoso. {15} He aquí, yo vengo como ladrón. Bienaventurado el que vela, y guarda sus ropas, para que no ande desnudo, y vean su vergüenza. {16} Y los reunió en el lugar que en hebreo se llama Armagedón.

12 – El sexto ángel derramó su copa sobre el gran río Éufrates; y el agua de éste se secó, para que estuviese preparado el camino a los reyes del oriente – Hay un incidente famoso en la historia en la que Ciro, el rey de Persia capturó a Babilonia desviando el río Éufrates que corre por el medio de Babilonia para que su ejército entrara a la ciudad por el lecho seco del río (Barclay). Hay una profecía contra Babilonia en Jeremías 50:38, “Sequedad sobre sus aguas, y se secarán; porque es tierra de ídolos, y se entontecen con imágenes”. Así como el Mar Rojo y el Jordán fueron secados para que los israelitas pudieran escapar de Egipto (Josué 2:10) y entraran a la tierra prometida, el río Éufrates es secado para hacer lugar para los reyes del Este. Algunos comentaristas ven una distinción entre los reyes del Este y los reyes de todo el mundo (v. 14). El Éufrates marca el límite entre Israel y sus enemigos (Génesis 15:18). Note la similitud entre la sexta copa y trompeta (9:14) en donde los cuatro ángeles atados junto al río Éufrates son soltados y sus tropas matan a un tercio de la humanidad.

13 – Y vi salir de la boca del dragón, y de la boca de la bestia, y de la boca del falso profeta, tres espíritus inmundos a manera de ranas – Esta es la primera mención del falso profeta, que es la bestia de la tierra, porque él es el que realizó las señales milagrosas en nombre de la bestia (13:13, cf. 19:20) y engañó a los habitantes de la tierra (13:14), y es destruido en 19:20. Vemos de nuevo aquí juntos a la trinidad no santa de Satanás, la bestia y el falso profeta. La bestia y el falso profeta reúnen a los reyes de la tierra para hacer guerra contra el jinete del caballo blanco y su ejército en 19:19 y son arrojados al lago de fuego y azufre en 19:20. Satanás junta a las naciones para la batalla contra el campamento del pueblo de Dios en 20:7 y se une a la bestia y el falso profeta en el lago de fuego (20:10). Tres espíritus malos salen de las bocas de estos tres. Que salgan de la boca probablemente indica que estos son espíritus engañadores. Compare con el río de mentiras que sale de la boca del dragón (12:15) y que contrasta con la espada del Hijo del hombre (1:16, 19:15). Las ranas son animales inmundos (Lev. 11:10). Los malos espíritus salen de la boca. Note que la palabra para espíritu es pneuma en griego, que es la misma palabra que aliento. Caird señala que de la boca de la bestia salieron pretensiones blasfemas de deidad (13:6), de la boca del falso profeta salió la propaganda seductora del culto imperial (13:12-15) y de la boca del dragón salió el río de mentiras con el que trató de vencer a la iglesia (12:15).

14 – pues son espíritus de demonios, que hacen señales – Las señales milagrosas son causadas por los demonios, y son realizadas por la bestia de la tierra (13:13) que es identificada aquí con el falso profeta. Son espíritus mentirosos como los que indujeron a Acab a la batalla (1 Reyes 22:21). Realizan milagros de la misma forma que lo hará cuando llegue el hombre de pecado (2 Tesalonicenses 2:9).

14 – y van a los reyes de la tierra en todo el mundo, para reunirlos a la batalla de aquel gran día del Dios Todopoderoso – Esta es la batalla de Armagedón (v. 16) que se menciona nuevamente en 17:14, 19:19 y 20:8. Este es un ejemplo de paralelismo en Apocalipsis. Esta batalla precede la Segunda Venida que se menciona en v. 15. Para otras referencias a la última batalla, ver también Zacarías 14, Joel 3 y Ezequiel 37, 38. Esto es también una referencia al Salmo 2:2, “se levantarán los reyes de la tierra, y príncipes consultarán unidos contra Jehová y contra su ungido”.

15 – He aquí, yo vengo como ladrón. Bienaventurado el que vela, y guarda sus ropas, para que no ande desnudo, y vean su vergüenza – Esta interjección es una advertencia a la iglesia, que Cristo viene pronto (cf. la advertencia a Sardis para que se despierte en 3:3). No deberíamos sorprendernos de esta interjección porque la Segunda Venida o la última batalla ocurre también en el sexto sello y en la sexta trompeta. Estar despiertos cuando Cristo vuelva es un tema común en las Escrituras, lo que significa estar preparados espiritualmente para Su venida (Mateo 24:43, 1 Tesalonicenses 5:1, 2 Pedro 3:10, Apocalipsis 3:2). Su Segunda Venida ocurre durante esta batalla, de ahí su mención inesperada (19:19-20, ver también Zacarías14:4, 5). Esta es la tercera de las siete bendiciones en el libro. La iglesia de Sardis tenía que despertarse (3:2); a los mártires se les dio una vestidura blanca, y había algunos en Sardis que no habían manchado sus ropas (3:4). Las ropas son las vestiduras de la salvación. Aquellos que han perdido sus ropas son los que se han alejado. Aquellos que andan exponiéndose vergonzosamente son personas cuyos pecados pueden verse, es decir los laodicenses desnudos a los que se les aconseja que compren vestiduras blancas para cubrir su vergonzosa desnudez (3:17-18).

16 – Y los reunió en el lugar que en hebreo se llama Armagedón – Esto se menciona nuevamente en 19:19 y 20:8, otro ejemplo de paralelismo en el libro. Armagedón o Har-Magedón. A Magedón se lo vincula normalmente con Megido, y Har significa montaña. Megido es un lugar de muchas batallas, pero no hay ninguna montaña allí. Esto es bastante enigmático y ha desconcertado a la mayoría de los comentaristas. El punto principal es que es el sitio de la gran batalla última. Megido es el lugar donde los enemigos de Israel son derrotados, liderados por Débora (Jueces 5:19). Armagedón es el símbolo de cada batalla en la que, cuando la necesidad es mayor y los creyentes están oprimidos, el Señor muestra repentinamente Su poder en beneficio de Su pueblo afligido y derrota al enemigo (Hendriksen). Esta última batalla se menciona aquí y en otras partes de Apocalipsis (17:14, 19:19, 20:9, cf. también 11:7; 13:7).

7. La séptima copa (16:17)

(Apocalipsis 16:17) El séptimo ángel derramó su copa por el aire; y salió una gran voz del templo del cielo, del trono, diciendo: Hecho está. {18} Entonces hubo relámpagos y voces y truenos, y un gran temblor de tierra, un terremoto tan grande, cual no lo hubo jamás desde que los hombres han estado sobre la tierra. {19} Y la gran ciudad fue dividida en tres partes, y las ciudades de las naciones cayeron; y la gran Babilonia vino en memoria delante de Dios, para darle el cáliz del vino del ardor de su ira. {20} Y toda isla huyó, y los montes no fueron hallados. {21} Y cayó del cielo sobre los hombres un enorme granizo como del peso de un talento; y los hombres blasfemaron contra Dios por la plaga del granizo; porque su plaga fue sobremanera grande.

La séptima copa sigue rápidamente a la sexta. No hay ningún interludio como lo hubo entre el sexto y el séptimo sello, y la sexta y la séptima trompeta, durante el cual la iglesia puede testificar. El tiempo del arrepentimiento ya ha pasado. Hay similitudes entre la séptima trompeta (11:15) y la séptima copa.

Grandes voces en el cielo

La ira de Dios ha llegado

El templo de Dios es abierto

Relámpagos, truenos, un terremoto, un gran granizo

17 – El séptimo ángel derramó su copa por el aire; y salió una gran voz del templo del cielo, del trono, diciendo: Hecho está – El aire es donde Satanás y sus demonios viven (Ef. 2:2). Así como la gran voz ordena que los ángeles derramen sus copas sobre la tierra (16:1) una gran voz desde el templo dice, “Hecho está”, lo que indica que con la séptima copa la ira de Dios se ha completado (15:1). Así como Jesús dijo, “Consumado es” cuando completó Su obra redentora. Lo que se ve aquí es la ira de Dios sobre la sociedad y sus estructuras; el castigo de los individuos ocurre más tarde. Contraste la destrucción aquí con 21:6, donde “Hecho está” aparece de nuevo porque el plan redentor de Dios está completado y hay un nuevo cielo, una nueva tierra y ciudad.

18 – Entonces hubo relámpagos y voces y truenos, y un gran temblor de tierra, un terremoto tan grande, cual no lo hubo jamás desde que los hombres han estado sobre la tierra – Compare esto con la apertura del templo de Dios en 11:19, “Y hubo relámpagos, voces, truenos, un terremoto y grande granizo.” Compare también con el incensario arrojado a la tierra como preludio a las siete trompetas (8:5, “y hubo truenos, y voces, y relámpagos, y un terremoto”). El juicio de Dios viene de dentro del templo y del trono; viene de Dios personalmente.

18 – un terremoto tan grande, cual no lo hubo jamás desde que los hombres han estado sobre la tierra – Este es el clímax del juicio de Dios, la destrucción completa en vez de parcial, como en los sellos y en las trompetas. Compare con Daniel 12:1, Ezequiel 38:19-20, Zac.14:4-5, Mateo 24:21 y especialmente la similitud de este pasaje con el sexto sello de 6:12-14.

19a – Y la gran ciudad fue dividida en tres partes, y las ciudades de las naciones cayeron – Ver Zac. 14:4 en donde el Monte de los Olivos es partido en dos cuando llega el Mesías. La única referencia anterior a la gran ciudad es la descripción de tres partes de 11:8 donde la gran ciudad es llamada figurativamente Sodoma y Egipto, donde también fue crucificado su Señor. Babilonia la Grande se menciona en la próxima oración (v. 19b). En 18:10 la gran ciudad es Babilonia, ciudad de poder. El lenguaje utilizado enfatiza la destrucción total de las ciudades del mundo y de su comercio, cultura, etc. (Isaías 24:18-21). Todo lo que fue hecho por el hombre es destruido. Esto está en contraste con la ciudad celestial que reciben los santos y que no puede ser conmovida (Hebreos 12:26). Note el lamento en tres partes de los reyes, los mercaderes y los pilotos de las naves sobre la destrucción de Babilonia en 18:9-20.

19b – y la gran Babilonia vino en memoria delante de Dios, para darle el cáliz del vino del ardor de su ira – Babilonia la Grande es presentada aquí y castigada. La gran ciudad aparece primero en 11:8. Así como Dios se acordó de Noé durante el diluvio (Génesis 8:1), y se acordó de Abraham cuando destruyó a Sodoma y Gomorra (Génesis. 19:29), y es acordó de Su pacto con Abraham cuando los israelitas estaban en esclavitud en Egipto (Ex. 2:24), se acordó a los crímenes de Babilonia (ver 18:5). Los próximos dos capítulos tratan de Babilonia con más detalle. Así como hizo que las naciones se embriagaran con el vino de su fornicación (17:2, 18:3), Dios la hace beber la copa de Su ira (ver también 14:8, Isaías 51:17). Si alguno adora a la bestia también beberá el vino de la ira de Dios (14:9). Es tiempo para que Babilonia sea juzgada (Jeremías. 51:13, “Tú, las que moras entre muchas aguas, rica en tesoros, ha venido tu fin, la medida de tu codicia”.

20 – Y toda isla huyó, y los montes no fueron hallados – Esto enfatiza la destrucción causada por el terremoto. Compare esto con la similitud del sexto sello en 6:14, donde “todo monte y toda isla se removió de su lugar”. Ver también Is. 13:13, 24:19-21. Hay también una similitud con el efecto de la presencia de Dios sobre el gran trono blanco, donde la tierra y el mar huyeron de Su presencia (20:11).

21 – Y cayó del cielo sobre los hombres un enorme granizo como del peso de un talento; y los hombres blasfemaron contra Dios por la plaga del granizo; porque su plaga fue sobremanera grande – Lo maldicen a Dios como hicieron con la cuarta y la quinta plaga, pero esta vez no hay ninguna mención de arrepentimiento. Esta es la actitud final de la humanidad hacia Dios; el tiempo del arrepentimiento ha pasado. La plaga del granizo corresponde a la séptima plaga sobre Egipto y es el juicio de Dios (Jos. 10:11, Ez. 38:22). El granizo es enviado por Dios (ver 11:19, donde de abre el templo de Dios, el arca del testimonio es visto y salen relámpagos, voces, truenos, un terremoto y grande granizo), así que la gente maldice a Dios por el granizo.

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Las Siete Trompetas Del Apocalipsis – Pastor Arturo Muñoz Guzmán

Texto Bíblico:

Apocalipsis 8:1-6 Y vi a los siete ángeles que estaban en pie ante Dios; y se les dieron siete trompetas. 3Otro ángel vino entonces y se paró ante el altar, con un incensario de oro; y se le dio mucho incienso para añadirlo a las oraciones de todos los santos, sobre el altar de oro que estaba delante del trono. 4Y de la mano del ángel subió a la presencia de Dios el humo del incienso con las oraciones de los santos. 5Y el ángel tomó el incensario, y lo llenó del fuego del altar, y lo arrojó a la tierra; y hubo truenos, y voces, y relámpagos, y un terremoto. 6Y los siete ángeles que tenían las siete trompetas se dispusieron a tocarlas.”

Siete ángeles tienen cada uno una trompeta que tocarán y que después se eso, algo sucederá.

A) PRIMERA TROMPETA

Apocalipsis 8:7 “El primer ángel tocó la trompeta, y hubo granizo y fuego mezclados con sangre, que fueron lanzados sobre la tierra; y la tercera parte de los árboles se quemó, y se quemó toda la hierba verde.”

1.- EVENTO QUE SUCEDERÁ:

Caerá granizo y fuego a la tierra.

2.- RESULTADOS EN LA tierra

1/3 parte de los árboles se quemarán y toda la hierba verde.

B) SEGUNDA TROMPETA

Apocalipsis 8:8 “El segundo ángel tocó la trompeta, y como una gran montaña ardiendo en fuego fue precipitada en el mar; y la tercera parte del mar se convirtió en sangre.”

1.- EVENTO QUE SUCEDERÁ.

Montaña ardiendo caerá al mar.

2,. RESULTADOS EN LA TIERRA

1/3 parte del mar se convertirá en sangre.

1/3 parte de seres vivientes del mar, morirán.

1/3 parte de naves se destruirán.

C) TERCERA TROMPETA

Apocalipsis 8:10-11 El tercer ángel tocó la trompeta, y cayó del cielo una gran estrella, ardiendo como una antorcha, y cayó sobre la tercera parte de los ríos, y sobre las fuentes de las aguas. 11Y el nombre de la estrella es Ajenjo. Y la tercera parte de las aguas se convirtió en ajenjo; y muchos hombres murieron a causa de esas aguas, porque se hicieron amargas.”

1.- EVENTO QUE SUCEDERÁ:

Una gran estrella de nombre ajenjo, ardiendo como antorcha, caerá en ríos y fuentes de agua.

2.- RESULTADOS EN LA TIERRA

1/3 parte de las aguas se volverán amargas.

Muchos hombres morirán por causa de esas aguas.

D) CUARTA TROMPETA

Apocalipsis 8:12-13 El cuarto ángel tocó la trompeta, y fue herida la tercera parte del sol, y la tercera parte de la luna, y la tercera parte de las estrellas, para que se oscureciese la tercera parte de ellos, y no hubiese luz en la tercera parte del día, y asimismo de la noche. 13Y miré, y oí a un ángel volar por en medio del cielo, diciendo a gran voz: !Ay, ay, ay, de los que moran en la tierra, a causa de los otros toques de trompeta que están para sonar los tres ángeles!”

1.- EVENTO QUE SUCEDERÁ:

1/3 parte del sol, 1/3 parte de la luna y 1/3 parte de las estrellas serán heridas.

2.- RESULTADOS EN LA TIERRA

1/3 parte de la luz del día se acaba, y también de la noche.

El primer ¡Ay!

E) QUINTA TROMPETA

Apocalipsis 9:1-11 El quinto ángel tocó la trompeta, y vi una estrella que cayó del cielo a la tierra; y se le dio la llave del pozo del abismo.m2Y abrió el pozo del abismo, y subió humo del pozo como humo de un gran horno; y se oscureció el sol y el aire por el humo del pozo.m3Y del humo salieron langostas sobre la tierra; y se les dio poder, como tienen poder los escorpiones de la tierra.4Y se les mandó que no dañasen a la hierba de la tierra, ni a cosa verde alguna, ni a  ningún árbol, sino solamente a los hombres que no tuviesen el sello de Dios en sus frentes. 5Y les fue dado, no que los matasen, sino que los atormentasen cinco meses; y su tormento era como tormento de escorpión cuando hiere al hombre. 6Y en aquellos días los hombres buscarán la muerte, pero no la hallarán; y ansiarán morir, pero la muerte huirá de ellos. 7El aspecto de las langostas era semejante a caballos preparados para la guerra; en las cabezas tenían como coronas de oro; sus caras eran como caras humanas; 8tenían cabello como cabello de mujer; sus dientes eran como de leones; 9tenían corazas como corazas de hierro; el ruido de sus alas era como el estruendo de muchos carros de caballos corriendo a la batalla; 10tenían colas como de escorpiones, y también aguijones; y en sus colas tenían poder para dañar a los hombres durante cinco meses. 11Y tienen por rey sobre ellos al ángel del abismo, cuyo nombre en hebreo es Abadón, y en griego, Apolión.”

1.- EVENTO QUE SUCEDERÁ:

Cae una estrella

El ángel abre el pozo del abismo.

2.- RESULTADOS EN LA TIERRA

*Sale mucho humo del pozo y como consecuencia, se oscurece el sol y el aire.

*Suben de ese humo langostas que atormentaran a los hombres que no tengan el sello en sus frentes.

El rey de las langostas se llama Abadón (hebreo) o Apolión (griego)

Las langostas los atormentarán como escorpiones durante 5 meses.

*No podrán morir, porque la muerte huirá de ellos.

F) SEXTA TROMPETA

Apocalipsis 9:13-21 “El sexto ángel tocó la trompeta, y oí una voz de entre los cuatro cuernos del altar de oro que estaba delante de Dios, 14diciendo al sexto ángel que tenía la trompeta: Desata a los cuatro ángeles que están atados junto al gran río Eufrates. 15Y fueron desatados los cuatro ángeles que estaban preparados para la hora, día, mes y año, a fin de matar a la tercera parte de los hombres. 16Y el número de los ejércitos de los jinetes era doscientos millones. Yo oí su número. 17Así vi en visión los caballos y a sus jinetes, los cuales tenían corazas de fuego, de zafiro y de azufre. Y las cabezas de los caballos eran como cabezas de leones; y de su boca salían fuego, humo y azufre. 18Por estas tres plagas fue muerta la tercera parte de los hombres; por el fuego, el humo y el azufre que salían de su boca. 19Pues el poder de los caballos estaba en su boca y en sus colas; porque sus colas, semejantes a serpientes, tenían cabezas, y con ellas dañaban. 20Y los otros hombres que no fueron muertos con estas plagas, ni aun así se arrepintieron de las obras de sus manos, ni dejaron de adorar a los demonios, y a las imágenes de oro, de plata, de bronce, de piedra y de madera, las cuales no pueden ver, ni oír, ni andar; 21y no se arrepintieron de sus homicidios, ni de sus hechicerías, ni de su fornicación, ni de sus hurtos.”

1.- EVENTO QUE SUCEDERÁ:

El ángel desatará a los 4 ángeles que están atados junto al río Éufrates.

2.- RESULTADOS EN LA TIERRA

Matar 1/3 parte de los hombres.

El número de los ejércitos de los jinetes son 200 millones.

De la boca de los caballos sale fuego y azufre.

Nota Importante:

Y los otros hombres que no fueron muertos con estas plagas, ni aun así se arrepintieron de las obras de sus manos, ni dejaron de adorar a los demonios, y a las imágenes de oro, de plata, de bronce, de piedra y de madera, las cuales no pueden ver, ni oír, ni andar; y no se arrepintieron de sus homicidios, ni de sus hechicerías, ni de su fornicación, ni de sus hurtos. Apocalipsis 9:20-21

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Los Siete Sellos Del Apocalipsis – Pastor Arturo Muñoz Guzmán

Texto Bíblico:

Apocalipsis 5:1-5 Y vi en la mano derecha del que estaba sentado en el trono un libro escrito por dentro y por fuera, sellado con siete sellos. 2Y vi a un ángel fuerte que pregonaba a gran voz: ¿Quién es digno de abrir el libro y desatar sus sellos? 3Y ninguno, ni en el cielo ni en la tierra ni debajo de la tierra, podía abrir el libro, ni aun mirarlo. 4Y lloraba yo mucho, porque no se había hallado a ninguno digno de abrir el libro, ni de leerlo, ni de mirarlo. 5Y uno de los ancianos me dijo: No llores. He aquí que el León de la tribu de Judá, la raíz de David, ha vencido para abrir el libro y desatar sus siete sellos.”

Introducción:

Para poder entender este pasaje, tenemos que entender en qué tiempos han de pasar estas cosas. En Apocalipsis 2 y 3, se relata el tipo de iglesias que hay y habrá durante el periodo de la Iglesia; y en Apocalipsis 4.1 se hace mención del fin del periodo de la Iglesia, mostrando a Juan lo que pasaría después del arrebatamiento de la Iglesia. “Después de esto miré, y he aquí una puerta abierta en el cielo; y la primera voz que oí, como de trompeta, hablando conmigo, dijo: Sube acá, y yo te mostraré las cosas que sucederán después de estas.

Una vez terminando este periodo, comienza la última semana profética de Daniel (también conocida como “La Gran Tribulación”), y durante esta semana, ocurrirá lo de los sellos de Apocalipsis, nosotros (Los salvos de todos los tiempos; A.T. y N.T.) estaremos en las bodas del Cordero, mientras la tierra pasará por juicio Divino.

Daniel 9.27 “Y por otra semana confirmará el pacto con muchos; a la mitad de la semana hará cesar el sacrificio y la ofrenda. Después con la muchedumbre de las abominaciones vendrá el desolador, hasta que venga la consumación, y lo que está determinado se derrame sobre el desolador.”

Los sellos pueden tomarse como continuidad uno del otro; Con esto en mente, veamos como comienza la última semana de Daniel: 

A) Primer Sello

Apocalipsis 6:1-2 Vi cuando el Cordero abrió uno de los sellos, y oí a uno de los cuatro seres vivientes decir como con voz de trueno: Ven y mira. 2Y miré, y he aquí un caballo blanco; y el que lo montaba tenía un arco; y le fue dada una corona, y salió venciendo, y para vencer.”

Muchos al interpretar este pasaje, se van con la idea de que es Cristo el del caballo blanco pero no puede ser Cristo porque él está en el Cielo (bodas del Cordero) abriendo los sellos, y la escena que se ve, está ocurriendo en la tierra.

Apocalipsis 6.1 “Vi cuando el Cordero abrió uno de los sellos, y oí a uno de los cuatro seres vivientes decir como con voz de trueno: Ven y mira.”

Viene el anticristo en un caballo blanco (siempre tratando de imitar a nuestro Gran Dios), trayendo una falsa y temporal tranquilidad, el color blanco representa pureza y paz, la cual usará para engañar a muchos.

Mateo 24:5 “Porque vendrán muchos en mi nombre, diciendo: Yo soy el Cristo; y a muchos engañarán.”

B) SEGUNDO SELLO.

Apocalipsis 6:3-4 Cuando abrió el segundo sello, oí al segundo ser viviente, que decía: Ven y mira. 4Y salió otro caballo, bermejo; y al que lo montaba le fue dado poder de quitar de la tierra la paz, y que se matasen unos a otros; y se le dio una gran espada.”

A la mitad de la semana (tres años y medio), se le dará poder para hacer guerra y matar a cuantos el quisiese; el segundo sello representa la guerra.

Daniel 9.27 “Y por otra semana confirmará el pacto con muchos; a la mitad de la semana hará cesar el sacrificio y la ofrenda. Después con la muchedumbre de las abominaciones vendrá el desolador…”

El caballo rojo o bermejo representa la sangre derramada por la guerra en esos tiempos, ya que muchos serán decapitados por el anticristo.

C) TERCER SELLO.

Apocalipsis 6:5-6 Cuando abrió el tercer sello, oí al tercer ser viviente, que decía: Ven y mira. Y miré, y he aquí un caballo negro; y el que lo montaba tenía una balanza en la mano. 6Y oí una voz de en medio de los cuatro seres vivientes, que decía: Dos libras de trigo por un denario, y seis libras de cebada por un denario; pero no dañes el aceite ni el vino.”

Cuando hay guerra, automáticamente viene hambre en la tierra, ya que la economía se detiene para dar prioridades a la guerra y lo que el caballo negro representa es Hambre.

Mateo 24:7 “Porque se levantará nación contra nación, y reino contra reino; y habrá pestes, y hambres, y terremotos en diferentes lugares.”

Quién tendrá el control sobre los alimentos será el anticristo

D) CUARTO SELLO.

Apocalipsis 6:7-8 Cuando abrió el cuarto sello, oí la voz del cuarto ser viviente, que decía: Ven y mira. 8Miré, y he aquí un caballo amarillo, y el que lo montaba tenía por nombre Muerte, y el Hades le seguía; y le fue dada potestad sobre la cuarta parte de la tierra, para matar con espada, con hambre, con mortandad, y con las fieras de la tierra.”

Cuando hay guerra, hambre, claramente se espera la muerte; miles y miles de personas perderán sus vida, pero lo más triste es lo que viene tras la muerte, el Hades, el castigo y muerte eterna. La 4ª parte de los hombres de la tierra morirá a causa de la violencia, del hambre y de la pestilencia.

E) QUINTO SELLO.

Apocalipsis 6:9-11 Cuando abrió el quinto sello, vi bajo el altar las almas de los que habían sido muertos por causa de la palabra de Dios y por el testimonio que tenían. 10Y clamaban a gran voz, diciendo: ¿Hasta cuándo, Señor, santo y verdadero, no juzgas y vengas nuestra sangre en los que moran en la tierra? 11Y se les dieron vestiduras blancas, y se les dijo que descansasen todavía un poco de tiempo, hasta que se completara el número de sus consiervos y sus hermanos, que también habían de ser muertos como ellos.”

Estas almas, son de personas que fueron salvas durante la gran tribulación, esperando el juico sobre el anticristo. Los mártires, que murieron a causa de la Palabra de Dios.

F) SEXTO SELLO.

Apocalipsis 6:12-17Miré cuando abrió el sexto sello, y he aquí hubo un gran terremoto; y el sol se puso negro como tela de cilicio, y la luna se volvió toda como sangre; 13y las estrellas del cielo cayeron sobre la tierra, como la higuera deja caer sus higos cuando es sacudida por un fuerte viento. 14Y el cielo se desvaneció como un pergamino que se enrolla; y todo monte y toda isla se removió de su lugar. 15Y los reyes de la tierra, y los grandes, los ricos, los capitanes, los poderosos, y todo siervo y todo libre, se escondieron en las cuevas y entre las peñas de los montes; 16y decían a los montes y a las peñas: Caed sobre nosotros, y escondednos del rostro de aquel que está sentado sobre el trono, y de la ira del Cordero; 17porque el gran día de su ira ha llegado; ¿y quién podrá sostenerse en pie?”

Además, habrá terremotos y tanto será la aflicción que querrán morirse pero la muerte huirá de ellos.

Lucas 21:25-26 Entonces habrá señales en el sol, en la luna y en las estrellas, y en la tierra angustia de las gentes, confundidas a causa del bramido del mar y de las olas; 26desfalleciendo los hombres por el temor y la expectación de las cosas que sobrevendrán en la tierra; porque las potencias de los cielos serán conmovidas.”

G) SÉPTIMO SELLO.

Apocalipsis 8:1-6 Cuando abrió el séptimo sello, se hizo silencio en el cielo como por media hora. 2Y vi a los siete ángeles que estaban en pie ante Dios; y se les dieron siete trompetas.”

Es el inicio de las siete trompetas, ahora viene el juicio para el mundo y el anticristo por parte de Dios.

¿En estos tiempos también la tierra sufre angustias, y a quién estás clamando?

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